JESSICA PULLO, es una de las grandes exponentes argentinas del diseño sustentable.
Las injusticias no le son indiferentes.
Nació en el Barrio Hernández, cerca de la Salada y de los basurales. Conoció así, las adversas realidades de la industria textil: inmigración, explotación y contaminación.
De su tesis final de grado lo que hoy es su marca: BIOTICO con la que apunta a reparar
estas situaciones.
Jesica experimenta en el área de reciclaje de residuos.
Con cortes y encastres de sachets de leche y bolsas de snacks, ella genera el material
ideal para sus creaciones: carteras, fundas, monederos, billeteras, arneses y boleros,
Una vez establecido su proceso textil, se contactó con diversas ONG y así fue como
durante dos años capacitó a las personas de ALPAD (Asociación Laboral Para Adultos
con Discapacidad intelectual) para la producción del material. Buscó que todas y todos
los participantes puedan rotar en las distintas tareas y sentirse integrados a un
circuito.

Valora el trabajo en familia - es su tío quien se encarga de la costura. Aspira a capacitar
a personas en situación vulnerable para incorporarlas también a esta etapa.
Realiza una colección anual que incluye indumentaria y accesorios. No repite modelos.
No tiñe para evitar el uso de sintéticos. Los colores de sus productos son blanco, negro
y plateado. Promueve los costos abiertos que detalla con claridad y honestidad en su
página web: https://biotico.com.ar/.
Su misión es inspirar a otros y generar una transformación social y ambiental.